Bicho... ¡Bichón Maltés!

¡Hey, bloggeros! Hoy hablaremos de una raza de perro muy... elegante.

Con mi peluquero, fijo que voy a la alfombra
de los Óscar...

¡Hoy hablaremos del Bichón Maltés!

Sin duda, una raza que destaca por su belleza y soltura, de pequeño tamaño, y muy amable. Curiosamente, hoy mismo conocí a una perrita de esta raza cuyo nombre era Lala.

Los ancestros de la raza se usaban para cazar las ratas de los barcos, pero su origen no está del todo claro. Se cree que los comerciantes egipcios trajeron la raza hasta Italia, y desde allí se expandió al resto del mundo. La raza ha sufrido muchos cambios, con intención de hacerla más pequeña, e incluso ha estado al borde de la extinción en una ocasión. Llegados a este punto, los criadores no tuvieron más remedio que cruzarla con otras razas para evitar esto, lo que ha causado que el bichón maltés de hoy en día tenga muchas variedades.

*Su nombre no tiene nada que ver con la Isla de Malta, al sur de Italia, sino con un antiguo vocablo, "màlat", que significa "puerto". Recordemos que el primer trabajo de la raza era cazar las ratas de los barcos.

Un cuerpo delgado y pequeño y un pelaje siempre blanco, sedoso y suave son las principales características de la raza: tiene en los ojos una expresión viva, y también tiene unas orejas de tamaño mediano, así como su peluda cola, curvada hacia la espalda. Su pelaje sin retocar es rizado, pero muchos dueños deciden alisarlo. Aunque suele ser completamente blanco, pueden existir manchas de color limón en este.

En cuanto al carácter, son perros activos, muy cariñosos, y geniales en pruebas de agilidad. No presentan problemas con niños, si estos son agradables con ellos. Suficientes paseos diarios, aunque no muy extensos (son perros pequeños, no necesitan mucho ejercicio) por día pueden ser positivos para que el bichón maltés socialice con otros perros. Es muy importante que el dueño o los dueños del bichón maltés pasen mucho tiempo con él, para que no se sientan tristes.

Se adaptan perfectamente a apartamentos, y necesitan un cepillado diario. Entre las enfermedades que pueden padecer se encuentran la luxación de rótula (fácil de prevenir si se mantiene a raya el peso del perro), conjuntivitis (debido a los roces del ojo con su pelo si este no se corta lo necesario, así como las pestañas), la atrofia de retina (una terrible enfermedad genética que ciega de forma permanente), y el síndrome del perro agitado, que es tratable con medicamentos, y que consiste en permanentes temblores que no son mortales pero que son muy molestos, y es totalmente necesario consultar al veterinario si este se da.

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