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¡Hey, bloggeros! Esta es una doble entrada, en la cual hablaré de dos razas de gato: el American Shorthair y el British Shorthair, dos razas de las cuales hablé en la anterior entrada, dos razas que son, junto con el gato persa, las "progenitoras" del gato exótico.
Bien, como es una doble entrada, comenzaremos hablando del American Shorthair.
American Shorthair:
El American Shorthair o gato americano de pelo corto es una raza de gato proveniente de América, como su nombre indica. Los primeros gatos llegaron de Inglaterra, para trabajar con los colonos británicos, pues era muy útil tener un animal de trabajo. Los americanos enseguida se dieron cuenta de la importancia de conservar una raza y trabajaron por preservarla. Esta raza es muy similar en la forma al British Shorthair (me estoy cansando de escribir el nombre), solo que este parece menos... ¿gordinflón? Este gato tiene una forma menos cuadrada, por así decirlo, que el Bri... bueno, que "el otro". Tiene unos ojos grandes y muy abiertos, y una amplia gama de colores en el pelaje, como el rojizo, el azul, el café, el canela, el negro, el crema...
Es un gato bastante ágil, suele pesar sobre 7 kg y tiene un pelo corto (de ahí viene lo de Shorthair) y duro. En su forma de ser es travieso y juguetón. No suele padecer enfermedades, pues es una raza resistente y robusta. Tiene una esperanza de vida de 15 a 20 años. Es muy goloso, y adora el exterior. Tiene un buen instinto de caza y es posible que nos obsequie con algún "premio" que capture, como un saltamontes, una mariposa, etc...
Estos gatos, a pesar de tener el pelo corto, necesitan, como todas las razas, un cepillado periódico, para evitar que se le enrede el pelo u otras cosas...
British Shorthair:
El British Shorthair es una raza de gato procedente del Reino Unido.
¿Casi nos extinguimos?... Glup... |
La raza nació cuando los romanos trajeron gatos hasta la isla, y estos gatos se extendieron por la zona. Estos gatos soportan muy bien todo tipo de climas: tienen un pelaje impermeable, y eso les ayuda a soportar muy bien la lluvia. Esta es, muy probablemente, la raza de gato más antigua de Inglaterra. No era una raza muy importante ni llamativa, hasta que, en el siglo XIX, la gente comenzó a mostrar interés por ella, convirtiéndose así en una raza popular.
Bueno, más que popular. La raza batió los récords de popularidad a finales de siglo, y ganó muchos puntos.
Sin embargo, se acabó lo que se daba. Tras la primera y la segunda guerra mundial, esta raza, por muy imposible que parezca, casi se extingue. Muchos animales domésticos se extinguen, sí. Como casi se extinguen, hubo que recurrir a un gato parecido, para salvar a la raza... ¿Quién fue?... ¡El persa, el gato persa! Por esta razón, el British Shorthair es en la actualidad más fuerte, con una forma distinta en la cabeza y con ojos más vivos. Podemos decir que el gato persa fue la "salvación del British Shorthair.
Un saltamontes... se me hace la boca agua... |
El British es un bonito gato muy amigable, amigo de sus dueños, muy fiel, y que jugará con los niños aunque ya sea adulto, siendo un gato muy recomendable para estos. Es bastante activo, que no os sorprenda viéndolo correteando por la casa, pues quiere "expulsar" esa energía, por eso también es recomendable sacarlo a fuera un rato, para que libere esa energía y para que no se excite demasiado.
Tiene, al igual que el American Shorthair, una amplia gama de colores, como el gris, el bicolor o el blanco, entre otros muchos.
No suele presentar problemas de salud.
¿Os ha gustado la entrada? ¿Cuál os ha gustado más, el American o el British?
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