16 de enero de 2015

¡Abisinio, mininio!

¡Hey, bloggeros! ¡Hoy hablaremos de una raza de gato!

¡Hoy hablaremos del gato Abisinio!

¿Qué es lo que pasa?
Esta raza proviene del Antiguo Egipto. En un principio, la raza era originaria de Abisinia (Etiopía). Sin embargo, en 1860, la raza llegó a Inglaterra en barco, con las tropas que regresaban de la guerra de Abisinia, extendiéndose rápidamente. Ya unos 70 años después, en 1929, se estableció como raza oficial, y fue más reconocida. 

Este encantador gato tiene un aspecto bastante salvaje, con una fisonomía que sin duda recuerda a la del puma. Es un gato mediano, compacto y flexible, con extremidades delgadas pero fuertes. Tiene el pelo corto y denso, al contrario que su variante, el gato Somalí

Tiene un rasgo muy llamativo: presenta un pelo punteado, que aparece en su manto atigrado. Es ágil, tiene una cola larga y cabeza en forma de cuña. El color de pelaje más común es el marrón rojizo, pero también existen otras variedades, como el rojo, el azul, el beis o el plateado. Requiere poco cepillado.

Son gatos activos y sociables, y son grandes escaladores de árboles: si veis un gato subido a un árbol probablemente sea un Abisinio.  Le gusta rodearse de otra gente y necesita atención, aunque no por eso es un gatito faldero: necesita libertad y no es feliz en espacios reducidos. Es tranquilo y su maullido es agradable.

Cansado... Muy cansado... ¿Quieres irte ya?
No necesita ser cepillado con mucha frecuencia (tiene el pelo corto), pero de vez en cuando viene bien para evitar la acumulación de pelo muerto. Como es un animal muy energético, necesita una alimentación energética. 

Puede presentar problemas de salud hereditarios, como la insuficiencia renal, la luxación de rótula o una hernia umbilical. Si como a mí desconocéis el significado de estos conceptos, buscad más información para saber más sobre estos problemas, ya que podrían ser importantes.

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