18 de enero de 2015

¡El emperador de la Ántartida!

¡Hey, bloggeros! Hoy hablaremos de un animal muy interesante... y grande...

¡Hoy hablaremos del pingüino emperador!

¡Sí, papá! ¡En el cole hemos aprendido mucho!
Sin duda, es la especie de pingüino más conocida, ya que es la más grande, tanto en altura como en peso. Tanto el macho como la hembra pueden llegar a los 120 centímetros, y superar los 30 kilos de peso. Son similares en plumaje, teniendo la parte frontal de color blanco, la espalda de color negro, la cabeza de color negro, las patas de color negro y una especie de "bufanda" de color amarillo que les rodea el cuello.

Ya se sabe que, al igual que todos los pingüinos, no puede volar, pero tiene unas alas fuertes, que les permite adaptarse a un hábitat marino. Hablando de su hábitat: habitan en toda la costa Antártica. Es el único continente en el que habitan. Viven en grupo, y esto les ayuda a defenderse contra el frío: un pingüino se pega a otro y de esa manera, no pierden calor y aguantan temperaturas muy extremas. Aunque su pelaje también ayuda en esta labor.

Pero, ¿qué pasaría si un miembro de la manada se perdiera? Sólo no aguantaría mucho, a decir verdad. Sin embargo, tienen un sistema de vocalización, que les permite lanzar un grito especial, y, de esa manera, ser reconocidos entre cientos de aves. Este método es muy eficaz, y así nunca hay problemas de ese tipo.

¿Qué comen? Se alimentan, sobre todo, de peces. Peces, sí, pero también crustáceos o cefalópodos, como el krill o el calamar. Para cazar tiene que sumergirse en el agua, pero eso no es problema: pueden soportar el frío de las aguas con su pelaje y también puede aguantar la respiración durante 18 minutos, con lo cual le permite bucear a unos 500 metros de profundidad.

Sí, tío... Creo que aquí hay peces...
El pingüino emperador es especialmente conocido por su forma de reproducirse. Recorren unos 50-120 kilómetros hasta llegar a la colonia de reproducción. La hembra solo pone un huevo, que incuba el macho mientras ella regresa a la costa para alimentarse. Se van turnando para ir a la costa y cuidar del polluelo.

Mientras el polluelo está incubando, la hembra está en el mar. Cuando eclosiona, el polluelo permanece entre las patas de sus padres, protegido por el plumaje ventral de estos. De esa manera, el polluelo está protegido de los depredadores. Al final, aprende a caminar, y los padres deben alimentarlo hasta que el polluelo se convierta en un adulto. Al final, los padres se van y se repite el ciclo.

Su esperanza de vida es de unos 20 años de edad, aunque ha habido casos en los cuales pingüinos han llegado a los 50 años. Esta especie está amenazada, sí, pero no del todo: según la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) esta variedad está "casi amenazada". Si todos cooperamos, estoy seguro que podremos cambiar esto y bajar el rango hasta liberar a esta especie del peligro que corre.

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