¡Increíble! ¡El gato nadador!

¡Hey, bloggeros! Hoy, en cuarto milenio, hablaremos del extraño caso del gato al que le gustaba el agua...

¡Hoy hablaremos del Van Turco!

Acaríciame... acaríciame...

Seguramente os habréis sorprendido al oír que a esta peculiar raza le gusta el agua, y también os habréis sorprendido al escuchar el nombre del gato. "Van Turco". El "Van" no es una conjugación del verbo "ir", no. El nombre se debe a un lago de Turquía, llamado "Lago Van". Este lago es el más grande de Turquía y también uno de los más grandes del mundo.

El gato habitaba en zonas montañosas próximas al lago, de ahí que su nombre sea el del lago. Curiosamente, el gato tenía mucha facilidad para nadar y adoraba entrar en contacto con el agua. Por ello, en Turquía se conoce como el "gato nadador". Es normal que no hayáis oído hablar de esta raza, pues es muy poco conocida, por desgracia.

Este gato es similar al Angora Turco, pero tiene algunas pequeñas diferencias respecto a este, como por ejemplo, el manto (el Van lo tiene más grueso) o las patas (el Angora las tiene más pequeñas). El Van se desarrolló y se extendió de manera natural en Turquía pero, luego de que se introdujeran algunas crías en el Occidente, se inició un programa de crianza, y la raza se extendió rápidamente.

El único color posible en la raza es el blanco, con tonos crema, rojo o negro en la cola, en algunas zonas de la cara, en la barriga y en las patas. Sus ojos, muy brillantes y atrayentes, pueden ser de color oro o azul. Tiene un pequeño hocico rosado y una cara redonda y un poco rechoncha. Posee orejas triangulares, bien altas.

¿Falta mucho para la hora del baño?

En Turquía, consideran que el Van auténtico es completamente blanco con ojos dispares (de distinto color) si bien la raza allí es, hoy en día, poco común. 

Pesa unos 5 kilos, ocho como máximo, y requiere un cepillado moderado, pues tiene un pelaje largo. Es un gato inteligente y muy afectuoso, pero también reservado e independiente. No es agresivo, por lo tanto, puede estar con niños, a no ser que le molesten mucho al gato. Eso sí, es un poco tozudo.

Tiene una esperanza de vida de unos 13-15 años. Puede padecer de sordera, una enfermedad hereditaria de los ejemplares blancos. También puede tener tricobezoares, es decir, bolas de pelo en el aparato digestivo. Estas bolas de pelo son fácilmente tratables a partir de un preparado a base de aceite de parafina.

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